Un día pensé
que los besos
eran los imaginados
que las caricias
eran infinitas
que tus palabras
alimentaban
un día imaginé
que los abrazos
quitaban el aire
eternamente
y las miradas
mataban
un segundo
un día supe
que la vida
era para mimarla
y dejarse mimar
que tus palabras
no alimentaban
pero sabían a gloria
cada día
me repito
sin remedio
que no sé nada
que imagino tanto
que pienso demasiado
La imaginación es el talón de aquiles de todo soñador...pero después llaga la claridad...Un abrazo caluroso!
ResponderEliminarTu gran amigo, Harpox